Empresa: Quiksilver 

Fundadores: Alan Green y John Law

Segmento de Mercado: Compañía estadounidense especializada en la elaboración de material y ropa de surf, skate y snowboard.

Contenidos

Los Fundadores de la Marca

Hace mucho tiempo, a finales de los 60s, dos surfistas (Alan Green y John Law) vivían en una de las mejores áreas que podían existir para un surfear: “Las Bells Beach”, cerca de Torquay en al sur de Australia.

Ambos, amantes y fieles practicantes del deporte, se encontraban con una problemática muy grande a la hora de surfear: los incómodos y poco prácticos “pantaloncillos cortos” que se usaban en la época. Esto, los motivó a fabricar sus propios “boardshorts” y con un préstamo de  $1900 dólares hecho por el padre de Alan, dieron inicio a su negocio.

Lo que ambos ignoraban era que años más tarde, lo que había empezado como un proyecto para satisfacer una necesidad propia, se convertiría en la principal empresa de ropa y accesorios surf en el mundo entero (Quiksilver).

El Momento Ideal

La razón principal por la que Quiksilver fue un éxito total  fue porque Green y Law acertaron con el momento preciso. El mercado de ese momento tenía una fuerte influencia de medios en cuanto a la “cultura surf”.

Películas  como Gidget en 1959 y The Endless Summer 1966 fueron una de las más fuertes influencias que se dieron. El surf, la arena, el sol y los estilos de vida sexual, fueron las tendencias que marcaron el momento y por las que muchas personas se sintieron atraídas. De pronto, un  creciente ejército de fanáticos querían sentirse parte de todo esto independientemente si surfearan o no.

Por otro lado, el equipamiento para este segmento de mercado era aún muy primitivo, había mucho que explorar en cuanto a productos y moda. Marcas como Ocean Pacific y Hang Ten, a pesar de que ya tenían más trayectoria, no se especializaban en el segmento de “mercado surf”, sino que vendían pantalones cortos y camisetas a un mercado mucho más amplio. 

Probablemente sus prendas resultaban útiles a la hora de utilizarlas, pero la gente del momento necesitaba exclusividad en el tema, necesitaba sentir la seguridad de que había una empresa especializada capaz de entender las necesidades de los surfistas y Quiksilver tenía una idea muy clara de lo que su gente buscaba.

“En el mundo de las empresas conviene mejor ser un especialista de algo que un especialista de todo”

Green y Law, entendían muy bien la necesidad del consumidor precisamente porque ellos también eran consumidores. Sabían lo que los surfistas del momento estaban en busca de: un mejor traje de baño, una mejor tabla de surf, bermudas que permitan moverse con facilidad y una sudadera ligera para utilizarla después de cada sesión.

“No hay mejor manera de saber que es lo que el cliente quiere que poniéndose en sus zapatos”

Una buena estrategia de Marketing siempre importa

Otro de los aspectos más importantes que contribuyó al crecimiento de la marca fueron los eventos y patrocinios que la compañía comenzó a hacer con los surfistas, snowboarders y skaters más famosos del momento. La compañía hizo todo lo posible para distanciarse de las campañas publicitarias comunes y lograr captar la atención de sus clientes de una forma diferente.

 

Entre las figuras más representativas por la cuales la marca se ha visto apoyada en aquel entonces podemos mencionar a Tom Carroll (campeón mundial de surf en 1984) Kelly Slater (campeón mundial de surf durante once veces ) y Tony Hawk (considerado el mejor skater del mundo).

A esto, se suman eventos que la marca auspicia como: Big Wave Invitational Series en Hawái (1984); considerado actualmente como el concurso más prestigioso en el surf  por los 30 pies de altura de sus olas, los Campeonatos Mundiales Amateurs en Newquay en Inglaterra (1986), el Quiksilver Pro en G-Land en Indonesia (1995), entre otros.

Expandiendo Fronteras 

Inicialmente, Quiksilver vendió sus productos de manera local, luego en tiendas de surf en otras partes de Australia y finalmente, por la demanda del producto, se vio obligado a vender licencias a otras partes del mundo.

En 1976, la compañía decidió expandirse al extranjero cuando el campeón de surf Jeff Hakman, tras haber competido en Australia, trajo consigo 20 pares de bermudas para venderlas en EEUU en su regreso. 

Cuenta la historia que Jeff estaba muy interesado en obtener una licencia de Quiksilver para su país, tanto que fue capaz de comerse un tapete de papel por ella. Fue en 1976, durante una de las reuniones con Green, que éste lo retó a comerse un trozo de papel a cambio de la licencia y Jeff no tuvo objeción alguna.

Con el permiso de venta en EEUU, solo hacía falta de un buen socio para emprender su aventura de negocios, y el candidato ideal era su amigo y compañero de surf  Rob McKnight.

Con un apretón de manos y con cientos de bermudas a su cargo, dieron inicio a su travesía a través de todas las tiendas surf que pudieron encontrar en la costas estadounidenses. Lo que había comenzado como un pequeño proyecto de negocios terminaría convirtiéndose en la  la principal industria moderna del surf en EEUU.

“Nunca tuvimos un plan de negocios, ningún estado de flujo de efectivo, nunca hicimos nada de eso”, dijo McKnight . “Este iba a ser un proyecto de juguete”.

Green y Law sabían que no todos los negocios alrededor del mundo iban a poder ser manejados bajo su persona y al ver el resultado que Hakman y McKnight habían conseguido en EEUU, optaron por una brillante solución.

Qué mejor manera de seguir manteniendo el enfoque de la empresa que dando sus licencias a personas que realmente estaban involucradas en el mercado. Fue así como, mediante sus eventos deportivos, comenzaron a reclutar gente de su confianza para continuar con el proceso de expansión. Pronto, se consolidaría un equipo de auténticos profesionales del surf que representarían la marca en los lugares en donde Green y Law no podían estar.

“La mejor manera de dejar un legado con tu empresa es formando un equipo que comparta y entienda tu visión”

Tom Carroll, el doble campeón del mundo, formaba parte del equipo en Australia; Robby Naish, el diez veces campeón del mundo de windsurfing, se encargaba de la Zona Europea y  Willie Morris campeón de surf de Estados Unidos era Jefe de Ventas en California.

De la Quiebra a Boardriders

A pesar de sus altos y bajos , ya han sido 50 años desde que Quiksilver está en el mercado. Actualmente la empresa ofrece una gama mucho más amplia de productos, sin embargo, sigue siendo reconocida como una de las principales marcas de ropa y accesorios para los deportes de tablas (surf, snowboarding y skate).

Es importante mencionar que la compañía, tras varios años difíciles en el mercado, terminó declarándose en bancarrota en Septiembre del 2015. Dos años más tarde optaría por una nueva estrategia de mercado creando una nueva marca que abarque el gran mercado deportes de tabla sin tener que modificar la “especialización de sus maracas”.

En 2017, la compañía cambiaría de nombre a Boardriders abarcando marcas como: Quiksilver, Roxy y DC Shoes. De esta forma, lograrían tener mayor control del mercado y a su vez conservar el enfoque particular de cada una de sus líneas de producto.

Sin embargo, tener el dominio de tres marcas distintas bajo un mismo nombre no sería suficiente para Boardriders, por lo que en 2018 decidió comprar la firma australiana Billabong International Limited, competitor directo de Quiksilver. Desde entonces, la empresa bajo el nombre de Boardriders, también incluye productos de las siguientes marcas: Billabong, Element , Von Zipper , RVCA y XCEL.

Si bien es cierto, con tanta variedad y competencia en el mercado, Quiksilver ya no puede ser la marca preferida de muchos… pero sea cuál sea tu elección, terminarás favoreciendo indirectamente.

“Si consideras que la las marcas que son directas competencias de tu empresa, podrían llegar a afectar el desempeño de tu compañía en el futuro, has lo que Quiksilver hizo. Cómpralas”